Pies más suaves y sin durezas


Un remedio muy antiguo pero también muy efectivo es aplicar sobre las durezas una capa gruesa de vaselina y después ponerse unos calcetines gruesos durante toda la noche. Al día siguiente, tendrás los pies más suaves aunque, si las durezas son muy acusadas, será necesario limarlas con un aparato especial o bien realizar, una vez a la semana, un "peeling" con sal gruesa o con un producto exfoliante específico para pies. Las durezas no se irán de la noche a la mañana pero, si eres constante, acabarán por desaparecer.




Comentarios

Entradas populares